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EL DIARIO digital
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Tras idas y vueltas, el gobierno de Javier Milei convocará a sesiones extraordinarias con la intención de tratar reforma electoral y da por descartada la posibilidad incluir el debate y la aprobación del Presupuesto 2025.
Pese al avance en las negociaciones abiertas de manera individual con los gobernadores, por los pasillos de Casa Rosada aseguran que las posibilidades de incluir la previsión para el año entrante son escasas, y endurecen su postura respecto a la propuesta original que explicó el mandatario en el Congreso.
"Habrá extraordinarias, pero no está confirmado el temario", sostuvo una alta fuente ante la agencia Noticias Argentinas al término de la reunión de Gabinete que encabezó el jefe de Estado esta mañana en el Salón Blanco de Casa Rosada.
Asimismo, aseguró que buscan debatir reforma política, específicamente la eliminación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la modificación del financiamiento de los partidos.
También podrían sumar la privatización de Aerolíneas Argentinas y los pliegos de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para integrar la Corte Suprema, de conseguir los votos necesarios para su aprobación y con la intención de demostrar que se habilitaron todas las instancias institucionales posibles para el nombramiento por su curso natural.
Si bien en los últimos días los negociadores del Poder Ejecutivo no descartaban avances en el tratamiento de la previsión para el 2025 con las provincias, hoy aclararon que los acuerdos son débiles y que la posibilidad de incluirlo en el temario "es muy baja" por lo que se espera la prórroga del presupuesto por segundo año consecutivo.
"No estamos dispuestos a negociar ninguno de los puntos del comunicado. Si ellos quieren presupuesto, tienen que aprobar el que está", insistieron tras la postura expuesta por los gobernadores de Juntos por el Cambio.
Tras un nuevo fracaso de la Cámara de Diputados en su intento por tratar el proyecto de Ficha Limpia, que impide a los condenados en segunda instancia poder ser candidatos a cargos electivos, por los pasillos de Balcarce 50 ven con buenos ojos la chance de tratarlo en diciembre a cambio de que el PRO y el radicalismo acompañen la reforma electoral.
Si bien consideran que se trata de un proyecto que "nadie quiere" y que es más para "sacar bandera" que para restringir judicialmente a los condenados, están dispuestos a trabajar para su sanción siempre y cuando los aliados desistan en sus matices con la ley de reforma para el Fortalecimiento Electoral.
La idea es poder avanzar en la eliminación de las PASO, la modificación de la ley Orgánica de Partidos Políticos y el sistema de financiamiento de las fuerzas que compiten en los comicios. De darse el peor de los escenarios y no conseguir el respaldo, consideran que instalar el tema le permitirá al Poder Ejecutivo avanzar, tarde o temprano, con las modificaciones planeadas.