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EL DIARIO digital
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El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, mantuvo este viernes a la tarde su primera reunión con alrededor de cuarenta diputados y senadores de La Libertad Avanza, la mayoría de la fuerza parlamentaria que tienen el oficialismo, con quienes habló de la agenda parlamentaria que viene, prometió más comunicación, y evitó dar precisiones sobre el contenido del discurso que esta noche dará Javier Milei en la apertura de sesiones ordinarias.
El ministro coordinador -a quien tres meses después de asumir todavía no se le conoce la voz ni ofreció declaraciones públicas- no brindó pistas concretas del discurso que tendrá esta noche Milei.
Sí se llevaron el pedido para que ambas Cámaras se defienda el mega DNU 70/2023 que está en vigencia, pero que aún no se discutió en el Parlamento. Por más que tiene algunos artículos suspendidos por resoluciones judiciales y que en el Senado probablemente se lo rechace, el Ejecutivo intentará que esa defensa no lo haga naufragar y se pueda avanzar con desregulaciones en diversos sectores económicos que se consideran imprescindibles.
A Posse, uno de los funcionarios que guarda más bajo perfil dentro del gobierno libertario, lo acompañaron el ex diputado y actual secretario de Relaciones Parlamentarias y con la Sociedad Civil, Omar De Marchi, quien tiene como misión ser el enlace entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, el Secretario Ejecutivo de Gobierno de la Jefatura de Gabinete, José Rolandi; el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, el subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría general de la Presidencia, Eduardo "Lule" Menem, y el subsecretario del ministerio del Interior, Lisandro Catalán. La reunión se produjo dos días después de que Milei recibiera a casi todos los legisladores de la Cámara Baja para repasar la gestión y la situación económica. La convocatoria había sido programada hace varios días, pero por algunos compromisos contraídos por Posse, recién se concretó este viernes.
"Habrá que ir fijándose en el semáforo de los artículos que tuvieron apoyo en Diputados, para tener una idea de por dónde se avanzará", contó uno de los asistentes a la reunión. "Ahí reunimos un capital político que hay que saber aprovechar", agregó. También ese legislador detalló que les anticiparon que "tendrán mucho trabajo" en el Congreso y que algunos estarán relacionados "con el capítulo fiscal, que es algo en lo que Milei insiste mucho".
El Gobierno había decidido quitar todos los artículos referidos a lo fiscal para que la también llamada Ley Ómnibus pudiera avanzar en el Parlamento. Por eso el ministro de Economía, Luis Caputo, el 26 de enero anunció que temas como el blanqueo de capitales, una moratoria, el adelanto de Bienes Personales, la ley de Ganancias, las retenciones y el cambio de la fórmula jubilatoria iban a quedar afuera. "Esto es lo que se retiraría. Hay consenso en el Congreso de que el resto del paquete es beneficioso para el país", aseguró.
"Evaluaremos nuevas medidas y trataremos de consensuarlas con los gobernados y legisladores en el futuro. Este es un gobierno que escucha, es lo que debemos hacer", había dicho Caputo también en aquella conferencia de prensa en la que intentó destrabar el proyecto que al final quedó trunco. "Habrá temas puntuales, fuera del ordenamiento de la Ley Bases que se volverán a mandar al Congreso, sobre todo para dejar expuestos a los que antes no nos quisieron acompañar", señaló uno de los legisladores que estuvo cara a cara con Posse.
Además, los legisladores se llevaron la promesa de que este tipo de reuniones serán periódicas, tanto con el presidente Milei como con Posse. "Somos pocos pero convencidos de que la libertad es el camino. Vamos a pelear para que Argentina salga adelante poniendo todo de nosotros", aseguró otro legislador libertario.
Desde la Jefatura de Gabinete indicaron que en este cónclave "se discutió la agenda parlamentaria hacia adelante y la articulación del trabajo entre el Ejecutivo y el bloque oficialista en el inicio del año legislativo".
Los asistentes empezaron a llegar después de las 11 de la mañana y personal de ceremonial los llevó hasta el Salón Sur, en el primer piso de la Rosada. Hubo asistencia casi perfecta. Hasta la diputada Marcela Pagano, que mantiene diferencias con sus pares y que la llevarían a la conformación de un minibloque en el Parlamento, estuvo presente.
Justamente uno de los objetivos del jefe de Gabinete fue conciliar en esas internas en las que estuvieron involucrados tanto diputados como senadores libertarios desde que asumieron en diciembre, que no sirvieron para descomprimir las trabadas relaciones entre el oficialismo y la oposición. Esas diferencias impidieron que algunas de las leyes que el Ejecutivo envió al Parlamento no se aprobaran en Extraordinarias y que tampoco avanzara el tratamiento del DNU 70 que contiene una gran cantidad de desregulaciones en la economía. Esta última iniciativa corre riesgos de ser rechazada con contundencia en el Senado.
La Libertad Avanza cuenta con 38 diputados y con 7 senadores nacionales. Al encuentro del miércoles habían acudido casi todos los diputados, pero la agenda parlamentaria no se abordó en profundidad.
Luego del fracaso de la Ley Bases y Puntos de Partida para la libertad de los argentinos en Diputados, notan en la Rosada que es necesario un ajuste en la estrategia parlamentaria.
También en las últimas horas el presidente Milei dio señales del trabajo que le espera a La Libertad Avanza en el Congreso, donde se maneja con bloques minoritarios y donde necesita permanentemente generar alianzas. Además del cónclave con los legisladores propios recibió en un almuerzo en su despacho al líder de la bancada del PRO, Cristian Ritondo, a quien en el principio de la gestión libertaria se había mencionado con insistencia para conducir la Cámara de Diputados, responsabilidad que finalmente recayó en alguien de la tropa propia, como el riojano Martín Menem.
En ese almuerzo no se debatió sobre cargos ni tampoco sobre una eventual fusión de los espacios, en el marco del acuerdo que ambos sectores están negociando de cara al futuro, pero fue un gesto hacia la oposición dialoguista con la que se intentan tender puentes.
"Hablamos de la realidad de la Argentina, de lo que está viendo, del proceso económico, pero lo que me dijo a mí es lo mismo que dice siempre en los medios. La verdad es que tiene una sinceridad absoluta", explicó Ritondo ante los periodistas acreditados en la sede gubernamental.
Mientras este encuentro se realice, desde la oposición piden que Posse rinda cuentas ante el Congreso. La solicitud la presentó el diputado radical y ex vicepresidente, Julio Cobos, quien señaló: "El 10 de diciembre asumió Milei. Sin embargo, al día de la fecha su jefe de gabinete, Nicolás Posse, ha evitado dar declaraciones públicas. Informar sobre la marcha del gobierno es un deber republicano establecido constitucionalmente".
La iniciativa que firmó Cobos junto a otros integrantes de la Unión Cívica Radical en la Cámara baja, como Pamela Verasay (Mendoza), Atilio Benedetti (Entre Ríos) y Fernando Carbajal (Formosa), entre otros, fundamentó el pedido en que "la Constitución Nacional, en su artículo 101, establece taxativamente que el jefe de Gabinete de ministros debe concurrir al Congreso al menos una vez por mes, alternativamente a cada una de sus Cámaras, para informar de la marcha del gobierno, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 71?.