Otra vez, militantes libertarios hicieron reunión en la vereda

Para la hora 19 habían programado una reunión en el local que La Libertad Avanza tiene en la calle Mariano Rosas pero -como ya les había ocurrido en la semana- no pudieron ingresar porque cambiaron la cerradura.

"El Consejo Ejecutivo provincial se reunió hoy en la sede y no pudo entrar a la misma porque (Juan Pablo) Patterer no entregó la llave que el mismo cambió. Un acto totalmente anti democrático y no respeta los principios republicanos", se quejó Ariel Eugenio Ibáñez, uno de los militantes.

En redes sociales distribuyeron un video donde se observa a Victoria Rambur, integrante del "triunvirato" de apoderados, intentar infructuosamente abrir la puerta. Por eso, terminaron deliberando en la vereda.

Hace dos semanas, después de un fallo del juez federal Juan José Baric que dejó en suspenso a la conducción que se había elegido y cuya batuta manejaba Juan Pablo Patterer, Luciano Ortiz aprovechó la volada y retomó la presidencia, con una reunión del partido que sus rivales consideran "trucha".

El contragolpe a esa movida por parte de Patterer y Nicolás Boschi fue convocar a un congreso extraordinario para el próximo 27 de febrero, donde intentarán reponerse como autoridades. Además de protagonizar esas pujas novelescas, son funcionarios públicos: Ortiz está a cargo del PAMI, Boschi y Patterer son las caras visibles de ANSES en la provincia.

Tras la decisión de Baric que reveló irregularidades en el modo en que a fines del año pasado se eligieron las autoridades de LLA, Ortiz movió los hilos para echar a Patterer como apoderado: hizo una reunión del Comité Ejecutivo partidario pero tuvo que ser en la vereda porque ingresar a la sede partidaria les fue imposible. Este domingo se repitió la escena.

Aún así, designaron como supuestos nuevos apoderados del partido a los integrantes de un triunvirato: Moisés Ortiz (hermano de Luciano y apoderado original), Victoria Rambur y Sebastián Abt. El Juzgado tomó esa información como válida. 

Patterer, Boschi y compañía impugnaron la medida, denunciaron que esa reunión se convocó y se hizo en menos de 24 horas, que no tenía quórum (hubo mayoría de firmas de integrantes suplentes) y que ni siquiera se usó el libro de actas correspondiente.

Dicen que pese al fallo judicial el congreso está en funciones y que es en ese ámbito donde se harán las correcciones que solicitó la Justicia: una carta orgánica, como corresponde, con artículos adecuados a la ley; y autoridades que no ocupen espacios incompatibles.