Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
La Asociación Gremial de Profesionales y Personal Superior de Vialidad Nacional declaró este lunes el estado de "alerta y asamblea permanente" en todo el país en respuesta a las recientes decisiones anunciadas por el Gobierno Nacional. La medida fue resuelta por unanimidad debido a la incertidumbre generada por la paralización de obras públicas y la inminente reducción del 30% de la planta de personal, así como por la posible fusión del organismo con otras dependencias estatales.
La misma decisión tomó el Sindicato de Trabajadores de Vialidad Nacional, tras una reunión en la que el administrador del organismo, el ingeniero Marcelo Campoy, anticipó una reestructuración del personal a nivel país.
El administrador general de Vialidad Nacional confirmó que no se llevarán adelante tareas de mantenimiento, conservación mejorativa ni nuevas obras en la Red Troncal Nacional, lo que impactará directamente en la infraestructura vial del país y en la seguridad de quienes transitan las rutas nacionales. A esto se suma la implementación de nuevas modificaciones en los horarios laborales que afectan la vida familiar y la operatividad del sector.
Otra de las preocupaciones que mantiene en vilo a los trabajadores y trabajadoras es el congelamiento salarial dispuesto para el sector público, lo que significará una pérdida del poder adquisitivo en un contexto inflacionario.
En este marco, los gremios en La Pampa denuncian que el gobierno avanza con su política de privatización en los corredores viales, incluyendo rutas claves en nuestra provincia como la 5 y la 188.
La Pampa, representada por el distrito 21 de Vialidad Nacional, cuenta con 150 agentes encargados de la atención de más de 1.600 kilómetros de red vial, una tarea que se verá gravemente afectada por estas medidas.
El secretario adjunto de la Asociación Gremial de Profesionales y Personal Superior de Vialidad Nacional, José Raúl Rizzo, expresó su preocupación ante los posibles despidos masivos: "Sobre una base de 5.400 agentes, ahora se pretende despedir a 1.800. Es terrible lo que está pasando con las rutas". En este sentido, alertó sobre el impacto de la paralización de la obra pública: "Desde que asumió este gobierno, se detuvieron las obras. El 60% de las rutas están en estado regular o malo, hay un gran deterioro".