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EL DIARIO digital
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El punto de encuentro es la Casa Museo de Antonio Tomás "Pacheco" Berhongaray. Allí, en los últimos días, comenzó discreto desfile de intendentes radicales que consideran que Martín Berhongaray tiene que ser el próximo candidato a diputado nacional de la oposición.
"En el radicalismo se respira una realidad y es que tienen en claro que si Martín no es candidato, las posibilidades de perder la banca son más grandes que nunca", explicó a El Diario un integrante del partido centenario local.
Uno de los recientes encuentros que tuvo Berhongaray en el edificio ubicado en la calle Perú de la capital pampeana fue con el jefe comunal de Juan Cruz Vega. El propio excandidato a gobernador subió a sus redes sociales una foto de esa reunión.
En la UCR rige actualmente lo que podría definirse como un obvio estado de conciencia: en las próximas elecciones va a ejercer un papel preponderante el escenario de fuerte polarización entre el Gobierno Nacional y las opciones antagónicas más vinculadas al kirchnerismo.
"Lógicamente los intendentes no quieren perder en sus localidades porque eso les puede complicar los planes a futuro, y tienen en claro que con cualquier candidato que no sea Berhongaray, la derrota está asegurada", explicó el dirigente que habló con este diario.
Por eso, hace algunos meses, varios jefes comunales y distintos dirigentes del interior empezaron a visitar a Berhongaray para pedirle que sea el candidato "o de un gran frente electoral que aglutine a toda la oposición o de un armado más reducido pero que les brinde la competitividad necesaria".
Esos mismos integrantes de la UCR tienen fresco el recuerdo de la elección provincial del año 2023, donde Martín Berhongaray estuvo cerca de arrebatarle la provincia al PJ, en lo que fue la mejor performance de la historia para el partido centenario.
"Todos se llevan la misma respuesta Martin tiene como objetivo prioritario la disputa por la gobernación en 2027, pero que no descarta ningún escenario que pueda ser funcional a potenciar esa situación", explicó la misma fuente.
Y agregó: "es decir, podría ser candidato solo si evalúa que a partir de una buena elección nacional puede mejorar sus chances de gobernar la provincia en el 2027".
Por ahora, Berhongaray se mantiene en riguroso silencio. Al menos hasta este jueves no quiso realizar ninguna definición en cuanto a su futuro político. "Nada que decir", dijo ante una consulta telefónica de El Diario.
Las conjeturas sobre una eventual candidatura de Berhongaray cobraron vida a partir de que en los últimos meses se lo vio en distintas recorridas por el interior, en compañía de intendentes, legisladores y dirigentes de conocida cercanía.
En línea con el planteo de la mayoría de los intendentes, el presidente del bloque de diputados del radicalismo, Hipólito "Poli" Altolaguirre, asegura ante propios y extraños que su amigo y correligionario tiene "la obligación" de ser candidato para "garantizar competitividad electoral" en el marco de un contexto sumamente complejo.
No hay casi nadie que no tengo a presente de lo ocurrido en la elección nacional del año 2023, donde las mezquindades internas del radicalismo y del Pro llevaron a Berhongaray a dar un paso al costado y decidir no ser candidato.
Eso derivó en un pésimo resultado electoral en el cual el radicalismo perdió su histórico lugar de representación y el Pro lo sostuvo, a pesar del magro resultado, solo porque la justicia bajó la candidatura del postulante libertario por "problemas formales".