Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
La Asociación de Trabajadores del Estado informó este viernes que se agudiza el reclamo salarial en Intendente Alvear. El gremio señaló que el día jueves 30 se amplió el reclamo a por parte de los y las empleadas municipales de Intendente Alvear. "La vice intendenta Agustina García se niega a reconocer las falencias en su gestión", señaló en un comunicado.
Luego de la asamblea realizada el día jueves 30 con el acompañamiento del Consejo Directivo Provincial (C.D.P) de ATE La Pampa, se votó la continuidad del paro por tiempo indeterminado. Esta semana el conflicto había escalado con el acampe frente al municipio.
Leandro Chirino Secretario del Interior de ATE remarcó la preocupación por la falta de respuesta que hay ante un reclamo que es genuino: "Es una vergüenza, empleados con más de 8 años cobran sueldos de $280.000", expresó con indignación.
Por su parte, repudiaron que la viceintendenta haya salido al cruce amenazando con descontar el día a quienes se manifiesten. "Ante la amenaza provocadora por parte de las autoridades de Intendente Alvear se resolvió continuar con las medidas de fuerza, no dando lugar a los atropellos de la patronal", aclararon.
El pasado lunes el conflicto sumó tensión con la presencia policial en el Corralón, donde supuestamente se intentó frenar la salida de equipos para recolectar residuos. Los empleados representados por ATE vienen desde hace meses diversos reclamos al Municipio, alguno de ellos acordados luego de varias reuniones en el ámbito de Relaciones Laborales, pero otros sin respuesta.
Desde ATE señalaron como principales reclamos el pago en tiempo y forma de salarios adeudados, el pase a planta de los trabajadores en situación irregular, algunos con una antigüedad de 8 años, y mejoras en las condiciones de trabajo. Otro de los puntos que generó enfrentamiento entre trabajadores y patronal es un bono local, que fue abonado en otras oportunidades, pero que esta vez el Municipio asegura que no puede hacer frente.
Un importante número de empleados municipales decidieron sumarse a las medidas de protesta y afectaron servicios como recolección de residuos, barrido y funcionamiento del polideportivo. Ante el cese de tareas, desde la Municipalidad destacaron que garantizan el derecho a huelga, pero advirtieron que descontarán los días de paro.
Desde ATE habían convocado a un paro para el pasado 19 de diciembre, que se frenó con un pedido de conciliación obligatoria por parte de las autoridades municipales. La Dirección de Relaciones Laborales con sede en Pico convocó a las partes, que mantuvieron varias reuniones y no llegaron a un acuerdo, con el foco en el bono local durante el último encuentro. La conciliación llegó a su fin el pasado 24 de enero y allí los trabajadores iniciaron el plan de lucha.
El paro de actividades comenzó el viernes de la semana pasada y afectó principalmente a la recolección de residuos en la localidad norteña, por lo que desde el Municipio buscaron conformar una pequeña cuadrilla que recoja los residuos domiciliarios en parte del ejido urbano y apeló también a la solidaridad de los vecinos para no sacar residuos en gran cantidad y, en lo posible, trasladarlos por su cuenta al centro de reciclado, donde sí se trabaja con normalidad.
El día lunes, con la tormenta que complicó las tareas a desarrollar en la calle, la situación se tensó en el Corralón Municipal donde supuestamente un grupo de trabajadores que adhirieron al paro intentó frenar la salida de máquinas municipales, por lo que se convocó a la policía.
Desde el mismo lunes por la tarde un grupo de empleados decidieron sumar a la protesta un acampe frente al Palacio Municipal. El conflicto escala por el momento, no hay signos de acuerdo a la vista, en el marco una situación de demandas que lleva varios meses.