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EL DIARIO digital
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General Pico (Agencia) En el marco de un acuerdo de juicio abreviado, el juez de control Alejandro Gilardenghi condenó a pena de prisión en suspenso, y una multa de mil pesos, a un hombre de 28 años que a mediados del mes de octubre fue sorprendido con un vacuno que acababa de matar en un campo de la zona de Embajador Martini.
Rodrigo Barrios fue considerado autor y materialmente responsables del delito de "abigeato agravado por haber sido cometido en las condiciones del art 164 CP, y por tratarse de una persona que se dedica a la crianza, cuidado y faena de ganado, en grado de tentativa" y por "simple tenencia de arma de fuego de uso civil, sin la debida autorización leal". La pena acordada fue de tres años de prisión de ejecución condicional y una multa de 1.000 pesos.
El acuerdo de partes fue presentado por el fiscal Luciano Rehechi, junto a la defensa del imputado, quien reconoció la autoría del hecho.
La denuncia fue radicada el 19 de octubre de 2024 por el propietario del campo "La Lore", ubicado en la zona de Embajador Martini, luego que el ahora condenado fuera sorprendido por la policía alrededor de las 20 horas del día anterior.
Barrios conducía una camioneta pick up marca Toyota Hilux, patente DVJ-606, que fue interceptada por policías de la zona cuando salía del campo. En la caja trasladaba un animal vacuno, que acaba de dar muerte con un golpe certero en la cabeza, para lo que utilizó una maza.
Los uniformados se comunicaron con el responsable del predio rural, quien se presentó en el lugar y, enojado, dijo no haber autorizado la muerte del animal. Por tal motivo, al día siguiente radicó la denuncia en sede policial.
La requisa de la camioneta arrojó también que Barrios trasladaba una carabina calibre 22 marca Bersa, con numeración no visible, y una mira telescópica marca Simmons.
La pena impuesta incluye el cumplimiento de las siguientes reglas de conducta por el término de dos años: fijar domicilio, abstenerse de relacionarse de cualquier modo con la víctima o acercarse al establecimiento rural "La Lore", someterse a la observancia de las reglas de conducta por el Juez de Ejecución Penal, y quedar al cuidado y contralor del Ente de Políticas Socializadoras y Unidad de Abordaje.