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EL DIARIO digital
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El oficialismo y la oposición retomarán este martes el diálogo en torno al proyecto de aporte solidario con el objetivo de alcanzar un acuerdo para su tratamiento.
Después de una semana en la que el gobernador Sergio Ziliotto abrió una grieta en el bloque monolítico que armaron los tres bloques opositores, al iniciar un diálogo con la UCR y el PRO que rechazó Comunidad Organizada, todavía queda mucho terreno por recorrer para un acuerdo político.
En la UCR también hubo un movimiento con la reunión en la que lograron sentar a los legisladores provinciales, los intendentes (que conducen políticamente en su territorio) y los dirigentes partidarios.
Con aquella convocatoria al diálogo, el gobernador Ziliotto buscó desgastar la estrategia de no dar quorum de la oposición. Por ahora fue un gesto fuerte, pero en la oposición señalan que todavía no están dadas las condiciones para sentarse.
"Estamos como la semana pasada", dijo un referente de la oposición, quien lidera su bloque.
La semana hubo un acuerdo: incorporar a las petroleras y a las mineras en el aporte solidario para un fondo de emergencia alimentaria. Pero nada más que eso.
"Este martes retomamos el diálogo", indicó esa fuente que no aventura si los acuerdos pueden llegar a cerrarse esta semana.
El presidente del bloque de la UCR, Hipólito Altolaguirre, defendió tres puntos a la hora de hablar del proyecto de aporte solidario: "no más impuestos", dijo para rechazar un cobro a través del impuesto a los vehículos, el impuesto inmobiliario y el aporte de los bancos.
"Si le cobras más al que paga impuesto a los vehículos y el inmobiliario es más impuesto. No lo apoyamos", dijo el jefe del bloque radical. Y repiten el argumento para dejar afuera a los bancos: "les va a llegar a cientos de miles de pampeanos y pampeanas".
Por eso, la oposición pretende que se avance en nutrir de recursos a ese fondo. Esta semana estarán los números finos de lo que representa el aporte de petroleras y mineras. Puede ser la llave de negociación del oficialismo para aliviar algunos de los otros impuestos, si elige sostenerlos.
A cinco meses de presentar el proyecto, el oficialismo deberá poner en la balanza si acepta una negociación, pero a la vez no querrá que se lea como una derrota política. Además, en la última semana tuvo ruido en su tropa: las incursiones del exgobernador Carlos Verna tal vez tengan alguna secuela política en el funcionamiento del bloque ya que desafió al presidente de esa parcialidad, Espartaco Marín.
Por el lado de la oposición es el mismo panorama. Cómo negociar sin que sea leído como una derrota política, sabiendo que la estrategia de no dar quorum puede agotarse de cara a la opinión pública.
Con este escenario, los dos sectores políticos deben buscar una negociación en la que ambos ganen. Una evaluación que la confrontación política a veces no permite vislumbrar.
En la apertura de sesiones ordinarias del período 2024 de la Legislatura provincial, el gobernador Sergio Ziliotto anunció la creación de un impuesto, al que llamó "aporte solidario" que pagarían el sector financiero, los propietarios de inmuebles y vehículos de mayor valuación fiscal y los salarios más altos de la administración pública.
Luego de idas y venidas y de más de 5 meses, el proyecto parece encaminarse, aunque las fuentes de financiamientos fueron variando con la discusión y los pedidos de la oposición.
Esos fondos se destinarían a financiar la asistencia alimenticia a los sectores más vulnerables en el contexto de grave crisis, según explicó en su mensaje legislativo el Gobernador en ese momento en la Legislatura provincial.