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EL DIARIO digital
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“El Estado nacional ha estado presente tratando de encontrar una solución y seguimos trabajando en esa dirección para dar previsibilidad y resolver las inversiones que hacen falta. Somos respetuosos del proceso en la Corte. Fueron muchos años de falta de una política estratégica que supere el diferendo y que permita el desarrollo de inversión en el que, en algunos casos, Mendoza se vio perjudicada”, sostuvo el jefe de Gabinete Marcos Peña, durante una entrevista con el diario mendocino Los Andes, sobre el conflicto con La Pampa por el río Atuel.
- Otro tema recurrente y vinculado con lo anterior, es la construcción de Portezuelo del Viento, más allá de la oposición de La Pampa. ¿El Ejecutivo nacional ratifica su voluntad política de concretarlo?, le consultaron.
- Por supuesto. Esperamos que el comité de cuenca pueda encontrar una vía de solución y si no, se terminará planteando la posición del Ejecutivo. Pero para nosotros es claramente una obra que sería positiva para el país y la provincia.
Garbó y otros temas
Además de abordar diferentes temas, Peña descartó que por el momento se analice la posibilidad de desplazar a la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, mediante un decreto presidencial. Al respecto, negó que las críticas del Ejecutivo hacia la jefa de los fiscales federales impliquen “presiones” a otro poder del Estado.
Por otra parte, admitió que puede haber votantes de Cambiemos disconformes con la situación económica pero confió en que en las próximas elecciones “se revalidará un proceso de cambio”. También aseguró que hay “una tendencia a la baja de la inflación” y que el empleo empezó a crecer. “El presidente Macri está en el centro de la escena política, no Cristina Kirchner”, sostuvo también el funcionario.
La siguiente es la entrevista del diario mendocino al Jefe de Gabinete de Macri:
-¿El Gobierno prevé desplazar a la procuradora Gils Carbó mediante un decreto?
-Hoy no estamos analizando esa posibilidad. Pero sí consideramos que ella tendría que haber tenido la actitud, siendo una militante kirchnerista, de correrse del cargo cuando asumió el nuevo presidente. Ella tendrá que explicar si fue porque se quería aferrar a un cargo o si su intención era generar una cobertura al gobierno saliente.
-¿Pero las críticas desde el oficialismo hacia Gils Carbó, incluso del Presidente, no implican presiones por parte de otro poder del Estado?
-Ha sido absolutamente clara la política del Gobierno respecto de la independencia del Poder Judicial, al punto que muchos nos critican ''''cómo puede ser que éste no esté preso''''. Porque hay un Poder Judicial. Creemos que la actitud militante-política de la procuradora no es compatible con su responsabilidad institucional. Queremos un procurador sin militancia política, no queremos poner un militante de Cambiemos.
-¿Cristina Fernández es la gran adversaria política del gobierno?
-El adversario del Gobierno tiene más que ver con el miedo y con la resignación que con una persona. Cambiemos es hoy la única fuerza nacional y hace dos años no existía como tal. Vamos a presentar excelentes candidatos en todas las provincias. El peronismo tiene una fragmentación mayor y está claro que la ex presidenta en Buenos Aires va a atraer mucha discusión pero creemos que Cambiemos depende de sí mismo.
-Usted dijo días atrás que el kirchnerismo es una expresión minoritaria en el país porque sólo tendrá representación en las elecciones en las provincias de Buenos Aires y Santa Cruz...
-Algo en Santa Fe, por ahí...
-Sin embargo, en el centro de la escena parecería estar Cristina Fernández...
-No coincido para nada, para nada.
-Pero el gobierno permanentemente se está definiendo a partir de sus movimientos...
-No coincido. Creo que es algo que tiene más que ver con el morbo de la discusión mediática. El centro de la escena lo ocupa Mauricio Macri como presidente de la Nación y Cambiemos como una fuerza política nacional.
-¿Y cómo oposición, quién?
-La oposición está fragmentada. La brecha que va a haber entre Cambiemos y el resto de las fuerzas a nivel nacional habla de una fragmentación muy grande (de la oposición). Lo que es natural después de gobernar décadas. Pasaron de ser menemistas, duhaldistas, kirchneristas. Lo mejor que le podría pasar a la Argentina es que ese peronismo se renueve y construya liderazgos para ser una contraparte constructiva. Rechazamos de plano la idea de que hayamos buscado polarizar o sostener a Cristina Kirchner. Una parte de la población se identifica con el kirchnerismo pero creemos que es minoritaria.
-¿El Gobierno es consciente de que una parte de sus votantes está disconforme, sobre todo, con la situación económica?
-Por supuesto. Sabemos que es una situación económica difícil, una transición compleja y dura. Al mismo tiempo, la mayoría de los argentinos sabe que, primero, no había alternativa a lo que estamos haciendo. Y segundo, que esto va a redundar en una mejora económica, en un crecimiento sustentable y en la posibilidad de proyectarnos a mediano y largo plazos como un país más estable y predecible. Ha pasado poco tiempo pero ya se ven algunos frutos: ha vuelto el crédito hipotecario, hay un aumento de pasajeros en avión; en Mendoza hubo un 20% de aumento al comparar semestre contra semestre, lo que genera más turismo y más trabajo. El aumento de la obra pública, las mejoras en el sector agropecuario. Y la baja de la inflación, que este año ya está en la mitad de 2016 y va a seguir bajando.
-A propósito de la inflación, ¿qué pronostica el gobierno para julio, teniendo en cuenta que hubo aumento de combustibles, de prepaga, de expensas?
-Hoy (por ayer) sale el IPC Nacional (NdR: el dato arrojó una suba de 1,2%). Ahora el Indec no sólo tiene estadísticas confiables, sino también datos federales. Al camino de baja de la inflación lo vemos consolidado y esa tendencia, independientemente de los vaivenes que vemos mes a mes, hará que estemos en la meta que nos propusimos…
-¿La meta es del 20%?
-No, la meta del Banco Central es del 12 al 17; probablemente sean algunos puntos más. Esa meta se va a terminar cumpliendo, si no es en diciembre, en los meses siguientes.
-¿Cuánto puede incidir el malhumor de algunos sectores respecto a la economía en las próximas elecciones?
-En agosto (por las PASO) y en octubre se juega algo más importante que una coyuntura económica. Las décadas de fracaso acumulado que generaron la pobreza y la falta de desarrollo en todo el país se van a solucionar a mediano y largo plazos.
-Pero los electorados votan con el bolsillo.
-Yo no tengo dudas de que la mayoría de los argentinos apoya este proceso de cambio y se siente protagonista del mismo. No se trata de ratificar a Macri o no, de apoyar a Cambiemos o no; se trata de revalidar ese deseo de cambio. Somos optimistas porque creemos que este proceso nació de abajo hacia arriba.
-Usted dice que se ha revertido el problema del empleo, pero hay información que habla de casi 23 mil despidos y suspensiones en el primer semestre del año…
-Hay que mirar el dato del Sipa (Sistema Integrado Previsional Argentino), de la AFIP. Se registran las altas y bajas. Es incontrastable, es un dato censal. Y ese dato nos indica que se creó más empleo que el que se destruyó. Es natural que en una economía haya creación y destrucción de empleo. Lo bueno es que ese balance cada vez es más positivo. El sector industrial todavía tiene un déficit. Pero hablamos de una caída, en total, del 2% del empleo industrial, que en gran parte tiene que ver con la recesión de Brasil.
-Pero también hay caída de empleo por decisiones del Estado. ¿No es el caso de Atucha?
-¿Qué sería lo de Atucha?
-Los dos mil trabajadores que quedaron afuera.
-Ahí el tema es interesante: se habla de ''''despidos en Atucha''''. No son empleados de Atucha. Son personas contratadas para una obra por una empresa tercerizada. Y esa obra terminó. Va a haber una obra el día de mañana y entonces se contratará personal. Pero la idea de que tenía que ser personal que pasara a Atucha es difícil de sostener.
-¿Está en estudio elevar la edad jubilatoria?
-No. Lo que está es lo que se votó en el Congreso que es crear una comisión para que en 2019 haya propuestas de analizar entre todos cómo es el diseño del sistema previsional para las próximas décadas.
-Otra versión es que el Gobierno analiza volver al sistema de AFJP.
-Es falso, falso. Otro lamentable intento de hacer política generando miedo, porque esperanzas no pueden generar. No hay riesgo de eso.