Entre Pocillos

La guerra del cerdo

El popularísimo vecino santarroseño, Beto Desuque, dialogando en la dominical mañana de ayer con su mozo preferido en el restobar de la calle Quintana: politiquería, crueldad y negocios.

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EL DIARIO digital

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Beto Desuque: - Buenas, buenas, buenas, bueeenasss… ¿qué tal, qué tal, qué tal? ¡Salú a esta gloriosa barra bullanguera!

Mesero: - Hoooola, Betito querido y del alma, ¿cómo andás vos? 

Beto Desuque: - No me puedo quejar. Así que acá ando, feliz de no ser jubilado. Je.

Mesero: - Reíte. Ya te va a tocar.

Beto Desuque: - Ponele. Pero ni eso está seguro, así que… no cantemos victoria. Capaz que para cuando nos llegue la hora, ni jubilarnos podemos. Peluca arrasa con todo.

Mesero: - Pelusa y compañía.

Beto Desuque: - Ponele, más vale. Sólo no podría hacer nada. Siempre hay un Cato Ardohain predispuesto a una agachada mayor. Je. Y siempre hay un radical a la mano, al que le llegás vía Banelco o como pida…

Mesero: - Yo pensaba, Betito… realmente… pobres jubilados… qué feas sensaciones deben estar padeciendo hoy en día.

Beto Desuque: - ¿Y qué te parece? Es insólito que todavía no hayan quemado algo, la verdad. Aunque suene un poco fogoso. Es casi una especie de nuevo capítulo de "La Guerra del Cerdo"…

Mesero: - ¿O sea?

Beto Desuque: - La Guerra del Cerdo es un texto de Bioy Casares, creo que después se hizo película, donde la violencia explota para ese lado: persiguen con odio a los viejos. Toda la rabia y la ira sobre ellos, "los inservibles"…

Mesero: - Ay, Betito, no sigas dando ideas…

Beto Desuque: - Esas ideas existen desde hace rato y en todos lados. Sólo que pocas veces se encuentra gente tan cruel para ponerlas en práctica, ponele. Por lo visto, llegó la hora.

Mesero: - Real. Porque además de perjudicar a los jubilados, lo disfrutan…

Beto Desuque: - Lo festejan. Es La Guerra del Cerdo, o algunos tramos de otra película, "La Naranja Mecánica". Te juro que veo a algunos personajes de los que serían la juventud violenta que arremete contra los viejos, como Santiago Caputo, y parecen calcados…

Mesero: - Y siempre hay pampeanos ilustres, ¿no?

Beto Desuque: - Nunca pueden faltar. Esta vez, más de uno. La de Cato fue mundial. Después de que se hizo tanta propaganda a sí mismo, diciendo que iba a viajar a China "con la suya" para promocionar productos pampeanos… ¡lo hicieron quedar!

Mesero: - ¿Cómo? ¿En serio?

Beto Desuque: - ¡El colmo del arrastrado! No viajó a China porque le dieron la orden de que se quedara en el Congreso para cagar a los jubilados…

Mesero: - ¡Fuá! Tenés que ser, eh…

Beto Desuque: - Muy.

Mesero: - Pero cuándo decís que "le dieron la orden"… ¿quién le dio la orden?

Beto Desuque: - Ponele que entre Mauricio el de los ojos celestes y El Peluca de las fuerzas del cielo.

Mesero: - Se fanatizó El Cato, ¿no?

Beto Desuque: - Ponele. Salió enamoradizo Pampito, je. Porque llegó diciendo que Milei era un salto al vacío y ahora se le cae la baba con los libertarios… es el presidente del club de fans.

Mesero: - Bueno, pero por lo menos es coherente, ¿no? Digo… siempre votó para el mismo lado, no como los radichetas que panquequearon.

Beto Desuque: - Totalmente. En ese sentido, el voto garca es previsible. Cato y Maquieyra votaron siempre contra los jubilados. Bien de entrada. No necesitaron de ningún Matzkin que los convenza.

Mesero: - ¿Cómo?

Beto Desuque: - Claro, otro de los pampeanos ilustres de esta historia fue Martín Matzkin, que es funcionario de La Pato Bullrich.

Mesero: - ¿Qué es de "El Toto" Matzkin?

Beto Desuque: - Es sobrino, pero más que nada es parte del mismo grupo. Je. Bueno, Martín Matzkin apareció en la mesa que convenció a los cinco radichetas. Con foto y todo.

Mesero: - ¿Y qué cargo tiene?

Beto Desuque: - Uy, es un nombre medio raro, pero justamente creado para eso, para rosquear con el Congreso, ponele. Reminiscencias del viejo "diálogo, consenso y coso".

Mesero: - Ah, volvió esa práctica.

Beto Desuque: - Nunca se fue, creo. Sólo que ahora es diálogo, consenso, coso, palos y gases.

Mesero: - Ah.

Beto Desuque: - Donde también inauguraron su temporada de diálogo, consenso y coso fue en el peronismo, habrás visto…

Mesero: - Ví la foto, sí. Intendentes de todos los palos.

Beto Desuque: - Como decíamos antes: de cada pueblo un paisano. Sí, hicieron los deberes para mostrar "unidad" y todo eso…

Mesero: - Pero es una foto…

Beto Desuque: - Una foto y un documento, sí… como puesta en escena vale, no sé si alcanza para algo más…

Mesero: - ¿Vos que decís?

Beto Desuque: - El tiempo dirá. Medio que acumularon la basura bajo la alfombra, y bué… pero bueno, estuvieron Fernanda Alonso, que se plantó sonriente en primer plano, y Copete di Nápoli, que prefirió meterse más atrás, casi al fondo…

Mesero: - No me digas que me vas a hacer una lectura política de la posición en la foto…

Beto Desuque: - No. Para tanto no me da. Pero la política está cambiando tanto que en cualquier momento todo va a estar definido en una foto.

Mesero: - Buá. Ponele.

Beto Desuque: - En ese caso la va a tener complicada Viki Huala, porque se la ha dado por mirar para otro lado. Je.

Mesero: - ¿Por?

Beto Desuque: - Digo, es una forma de decir… porque el otro día se mandó una muy extraña: fue la única senadora que se abstuvo a la hora de votar por el financiamiento universitario. Rarísimo.

Mesero: - Y bueno, pero distinta.

Beto Desuque: - Ah, eso sí… eso tenemos los pampeanos y pampeanas… siempre alguien de acá dando la nota.

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