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EL DIARIO digital
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En su segunda visita a Washington en lo que va del año, el presidente Javier Milei comenzó este jueves su agenda política y económica en esta capital con 12 grados bajo cero de sensación térmica, rodeado esta vez de un clima más caliente y complicado a nivel interno y global por el criptoescándalo de $Libra. El líder libertario arrancó con un encuentro con el cada vez más influyente empresario Elon Musk, a quien esperó con un regalo de su cosecha: una motosierra.
Luego se reunirá con la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva.
Milei llegó por la mañana a esta capital acompañado de la secretaria de la presidencia, su hermana Karina; el ministro de Economía Luis Caputo y el portavoz Manuel Adorni, que por primera vez se suma a un viaje del presidente a Estados Unidos. Los esperaba en Washington el canciller Gerardo Werthein. Es la novena vez que viene a EE.UU. desde que asumió la presidencia.
Más allá de los encuentros con Trump y Georgieva, Milei visitará el viernes el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial y el sábado disertará en la Conferencia de Acción Conservadora (CPAC) un foro de la derecha donde probablemente se encuentre en algún momento con el presidente Donald Trump, aunque no hay visita oficial pactada en Casa Blanca.
El republicano ya ha recibido en la mansión presidencial a los líderes de Israel, de Japón, de India, de Jordania. Se anunció que el lunes recibirá al francés Emmanuel Macron y el jueves al premier británico Keir Starmer.
Durante 45 minutos, la reunión con Musk sucedió por la tarde en el hotel donde está alojado Milei, en las afueras de Maryland. "Hola amigo", exclamó el presidente. Musk lo abrazó, saludó a Karina y se dispuso a abrir una enorme caja marrón que contenía un regalo del presidente argentino: una brillante e inmensa motosierra. Ambos se rieron a las carcajadas y se sacaron una foto con la herramienta símbolo de los recortes. "Vamos a ponerla en la oficina DOGE", dijo Musk.
Los "amigos" ratificaron su compromiso a seguir luchando por un "mundo libre", y según relataron los presentes, destacaron la urgencia de desregular la Economía e hicieron hincapié en la importancia de dar la batalla cultural en todos los frentes para combatir visiones como la del economista británico John Maynard Keynes: Milei y Musk coincidieron también acerca del daño que, según su visión, las regulaciones estatales le han hecho al desarrollo de los países y a su crecimiento económico.
En esa misma línea, ambos rechazaron el concepto de justicia social, como una forma "de que los pobres sigan votando a los empobrecedores".
Musk relató los supuestos negocios oscuros que encontró al iniciar su gestión para optimizar el funcionamiento del Estado norteamericano, y Milei aprovechó para contarle las "escandalosas" pensiones de invalidez truchas que se descubrieron al asumir su gobierno en el área de Capital Humano. El funcionario estadounidense se puso a disposición para ayudar al despegue de la Argentina.
El dueño de Tesla es hoy mucho más que la persona más rica del mundo porque se ha convertido en un poderoso asesor de Trump y es quien lleva adelante la "motosierra" en el gobierno estadounidense. Está al frente de la agencia DOGE (Departamento de Eficiencia Gubernamental) que desde que asumió Trump hace un mes está promoviendo recortes, accediendo a los sistemas informáticos, indagando en los presupuestos y buscando despilfarro, fraude y abusos.
Sin embargo, pesan sobre él muchas demandas judiciales que afirman que DOGE está violando la ley y al menos dos tienen como objetivo al propio Musk. Los demandantes quieren bloquear el acceso del empresario y su equipo a los sistemas informáticos gubernamentales y argumentan que está ejerciendo un "poder prácticamente sin control" y viola la Constitución.
Aun antes de asumir su rol, Musk ha elogiado la "motosierra" argentina y la oficina de desregulación que conduce Federico Sturzenegger. Se han reunido ya varias veces con Milei y ambos se profusan admiración y amistad por las redes sociales. El empresario tiene interés en los negocios con litio y comunicaciones en Argentina.
Milei llegó a Washington luego del escándalo desatado el viernes cuando mencionó al memecoin $Libra en su cuenta de X como un emprendimiento que beneficiaría a la Argentina, una movida que sedujo a varios inversionistas del país y también de EE.UU, que finalmente resultaron perjudicados. El presidente negó haber promocionado el emprendimiento.
El caso alcanzó repercusiones en Estados Unidos. Desde un estudio jurídico argentino se presentó una demanda ante el Departamento de Justicia y el FBI para que investigue a los protagonistas del caso y el rol de Milei en lo que podría ser una presunta estafa. Además, un estudio neoyorquino ya lleva registrados cientos de damnificados estadounidenses que buscan presentar una demanda colectiva.
Aunque hasta ahora no ha hecho comentarios públicos respecto al cripto-escándalo que provocó un tembladeral en el gobierno argentino con $Libra, Musk tiene desde hace años su propia historia con una "meme-coin", la Dogecoin.
Creada como una broma en 2013 por los ingenieros de software Billy Markus y Jackson Palmer, Dogecoin presenta la imagen del perro Shiba Inu popularizado en el meme Doge (casualmente el mismo nombre de la agencia que hoy conduce Musk). Tuvo un auge con el caso de GameStop en enero de 2021, pero trascendió aún más en febrero de ese año, cuando Elon Musk tuiteó simplemente la palabra "Doge". Enseguida el precio de Dogecoin subió drásticamente y los entusiastas de las criptomonedas de repente se interesaron por ese cripto-meme.