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EL DIARIO digital
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La campaña de cosecha gruesa 2024-2025 se anticipa desafiante debido a un pronóstico de año "Niña", caracterizado por lluvias por debajo de la media histórica. Este escenario genera dudas sobre la conveniencia de avanzar con cultivos de segunda, especialmente considerando las reservas de humedad limitadas en los suelos tras la trilla de cereales de invierno.
¿QUÉ JUEGA EN CONTRA DEL MAÍZ DE SEGUNDA?
Una de las mayores dificultades radica en la falta de humedad en el perfil del suelo. Las lluvias primaverales resultaron insuficientes para reponer los recursos hídricos tras el ciclo de los cultivos de invierno, dejando a los lotes con una perspectiva hídrica precaria. Si se cumplen los pronósticos climáticos, la posibilidad de recomposición es mínima.
¿POR QUÉ APOSTAR AL MAÍZ DE SEGUNDA?
A pesar de los desafíos, el maíz ofrece una alternativa robusta gracias a sus tecnologías avanzadas. Los híbridos resistentes a herbicidas de amplio espectro y a plagas como lepidópteros disminuyen los costos de manejo. Además, las proyecciones de precios para este cereal son alentadoras, lo que lo posiciona como una opción viable frente a la soja.
El sistema radicular del maíz, combinado con su aporte de rastrojo, mejora la estructura del suelo, fomenta la macro porosidad y potencia la infiltración de agua, beneficios clave para quienes practican siembra directa. También ayuda a mitigar problemas de encharcamiento en suelos planos.
A los beneficios antes expuestos de la gramínea se suma el mayor riesgo de ataques de plagas en cultivos como la soja, que demandan un manejo intensivo y costoso en años secos. Insectos como chinches, arañuelas y orugas complican aún más el escenario para esta oleaginosa, que además enfrenta bajos márgenes económicos en comparación con el maíz.
CLAVES TÉCNICAS PARA UN MAÍZ DE SEGUNDA EXITOSO
-Densidad de siembra: Es crucial optar por densidades ralas para evitar competencia entre plantas, lo que mejora la eficiencia del uso de recursos.
-Elección del híbrido: Es preferible seleccionar híbridos de ciclo intermedio a corto y de rápido secado, capaces de adaptarse a la ventana de maduración antes de las primeras heladas.
-Resistencia a enfermedades: El "Mal de Río IV" y el barrenador del tallo son amenazas importantes, por lo que se recomienda usar híbridos resistentes a estas condiciones.
-Control de malezas: Si las malezas problema son persistentes, está la posibilidad de sumar a los tradicionales híbridos resistentes a glifosato la tolerancia a otras moléculas, combinados con los herbicidas residuales tradicionales.
-Fertilización de arranque: Este aspecto es fundamental para suplir la falta de nutrientes disponibles en los suelos post-cosecha, ajustando las dosis a la disponibilidad hídrica y las expectativas de rendimiento.
Además de ser una herramienta para la rotación de cultivos, el maíz de segunda es una oportunidad para aumentar la superficie implantada con este cereal, reduciendo el monocultivo de soja y sus riesgos asociados. Su manejo relativamente sencillo, una vez establecida la siembra, lo convierte en una opción atractiva para empresas agrícolas y mixtas de mediana a gran escala.
ATENTOS A LAS PROMOCIONES
En esta época del año, las empresas semilleras suelen ofrecer calibres más pequeños a precios promocionales, una oportunidad para reducir costos en insumos sin comprometer la calidad del material genético, siempre y cuando contemos con la tecnología de siembra neumática o electrónica.
En conclusión, aunque el maíz de segunda en un año Niña presenta riesgos, puede transformarse en una apuesta estratégica y sustentable, si se adoptan las medidas técnicas adecuadas y se evalúan cuidadosamente las condiciones locales.
(*) Ingeniero Agrónomo (MP: 607 CIALP) -Posgrado en Agronegocios y Alimentos- @MARIANOFAVALP