Ambiental

Desafíos en la Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios: La Expe-riencia en La Pampa

El uso de agroquímicos: para la producción agrícola genera una importante cantidad de envases vacíos que, si no se manejan adecuadamente, pueden significar un impacto ambiental negativo significativo.

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EL DIARIO digital

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Esto pasa porque contienen residuos químicos que pueden contaminar suelos, aguas superficiales y subterráneas, poniendo en peligro la salud humana y los ecosistemas.

Anualmente, en nuestro país se generan unos 20 millones de envases vacíos, lo que equivale a unas 17 toneladas de ese material. En la provincia de La Pampa se generan por campaña (año) alrededor de 1 millón de envases de fitosanitarios. Antiguamente, estos envases vacíos terminaban dispersos por los molinos, enterrados, se quemaban, también se encontraban en los rellenos sanitarios y en muchos casos se hacía una comercialización informal. Debido a la toxicidad de los productos que contienen y de los restos que pueden quedar en ellos, estos envases requieren un manejo especial para evitar contaminar el suelo, el agua y los alimentos. Es así que la Ley Nacional de Presupuestos Mínimos N° 27.279, sancionada en 2016, representa un hito en la protección del ambiente y la salud pública en Argentina. Esta normativa establece un marco regulatorio para la gestión integral de los envases vacíos de fitosanitarios, con el fin de minimizar los riesgos asociados a la toxicidad de estos productos. Sus principales objetivos son:

-Garantizar una gestión integral y segura de los envases vacíos: Desde su producción hasta su disposición final, se establecen protocolos para evitar riesgos para la salud humana y el ambiente.

-Minimizar el impacto ambiental: La ley promueve la reutilización, el reciclaje y la disposición final adecuada de los envases, reduciendo así la generación de residuos peligrosos.

-Fortalecer el sistema de trazabilidad: para seguir el recorrido desde que se fabrican hasta que el envase es devuelto a lugares habilitados para su correcta gestión.

Actores involucrados

La implementación del sistema de gestión de envases vacíos de fitosanitarios, establecido por la Ley Nacional N° 27.279, implica un trabajo coordinado entre diversos actores y la puesta en marcha de una serie de procesos y mecanismos. De esta manera, los actores involucrados son:

Registrantes de fitosanitarios: empresas responsables de la fabricación o importación de productos fitosanitarios. La mayoría de los registrantes están agrupados en la Asociación Civil denominada Campo Limpio.

Productores agropecuarios y aplicadores: utilizan los productos fitosanitarios y generan los envases vacíos.

Empresas de logística: se encargan del transporte de los envases.

Operadores: son los que tratan los envases vacíos para su recuperación o disposición final.

Autoridad Competente: cuyas funciones, entre otras, son 

- Controlar y fiscalizar el cumplimiento de esta ley;

- Recibir y autorizar los sistemas de gestión presentados por los registrantes;

- Fiscalizar los sistemas integrales de gestión;

- Evaluar la posibilidad de unificar los sistemas de gestión, teniendo en cuenta su integración con otros, tendiendo a la conformación de sistemas integrados;

- Promover la creación de ámbitos territoriales regionalizados a los efectos de maximizar la eficiencia en el cumplimiento de la ley, mancomunando regionalmente los esfuerzos de implementación y control. 

Principales pasos del sistema de gestión:

Triple lavado o lavado a presión: los productores deben lavar exhaustivamente los envases para eliminar los restos de productos químicos. Estos envases son clasificados como envases tipo A. Aquellos que por sus características no pueden ser lavados, son clasificados como envases tipo B.

Almacenamiento temporal en el establecimiento en donde se generan: los envases lavados se almacenan en lugares seguros hasta su traslado a los centros de almacenamiento transitorio (CAT) autorizados.

Transporte a los CAT: los envases se transportan a los CAT en un vehículo que no tiene que estar habilitado.

Centro de Acopio Transitorio: en estos centros, los envases se almacenan correctamente para luego ser transportados al operador correspondiente que varía según el tipo de envase.  

Valorización: Los envases lavados (tipo A) pueden ser trasladados a un Operador que los pueda valorizar. Esto es, recuperar el material o asegurar su utilización como insumo o materia prima sustitutiva.

Disposición final: los envases que no pueden lavarse correctamente o los que pudiendo ser lavados no lo fueron (Tipo B), son enviados a un Operador que luego de tratarlos (hoy mediante incineración) los entierra en celdas de seguridad. 

Es importante resaltar que la normativa establece prohibiciones referidas al uso del material recuperado de modo que éste no implique riesgos para la salud humana o animal, o tener efectos negativos sobre el ambiente.

Centros de Acopio Transitorio (CAT) habilitados en La Pampa

En La Pampa, se encuentran habilitados cinco CAT en las localidades de Rolón, Alta Italia, Catriló, Colonia Barón y General Pico y se encuentran gestionando las correspondientes autorizaciones dos CAT más ubicados en Intendente Alvear y Santa Rosa.

Campañas Itinerantes

Complementariamente a los Centros de Acopio Transitorio, las campañas itinerantes que forman parte del Sistema de Gestión aprobado y que son llevadas adelante por Campo Limpio, tienen el objetivo de recolectar envases vacíos en aquellos lugares alejados de los CAT.

La normativa pampeana

En La Pampa, la Ley N° 3288 de Gestión Integral de Plaguicidas complementa a la Ley de Presupuestos Mínimos Nacional y contempla no solo la gestión de los envases vacíos, sino que también alcanza a las prácticas y los sujetos asociados a la comercialización y aplicación de plaguicidas tanto de uso rural como de uso urbano.

Responsabilidades compartidas

La Ley 27.279 asigna responsabilidades a todos los actores involucrados. Los productores y/o aplicadores deben cumplir con los procedimientos de triple lavado, almacenamiento y envío a un CAT; las empresas registrantes son responsables de la gestión integral de los envases; y los organismos de control de supervisar el cumplimiento de la normativa.

Desafíos y oportunidades

La implementación de esta ley implica varios desafíos, como la logística que se requiere para garantizar la correcta gestión de los envases vacíos, así como la necesidad de sensibilizar a todos los actores involucrados sobre la importancia de seguir los procedimientos correctamente. Asimismo, también representa una oportunidad para promover prácticas agrícolas más sostenibles y fomentar la economía circular.

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