Entre Pocillos: Cada cual atiende su juego

Beto Desuque: - Buenas, buenas, buenas, bueeeenaaasss… ¿Qué tal, qué tal, qué tal? ¿Cómo anda la cosa por acá, qué se cuenta?

Mesero: - Hoooola, Betito. Máster de América. ¿Cómo andan tus cosas?

Beto Desuque: - No me puedo quejar. Aparte viste cómo está de tranqui este veranito…

Mesero: - ¿Tranqui decís?

Beto Desuque: - En el sentido de la temperatura, digo, sobre todo. Hay días frescos. Amables. Casi otoñales, como se dice por ahí.

Mesero: - Sí, sí, muy cierto. En eso tampoco nos podemos quejar.

Beto Desuque: - Ponele. Aunque a veces me da un poco de miedo de que vengan todos los calores de golpe, así, repentinos y contundentes.

Mesero: - No seas pájaro de mal agüero. Ya veo que nos cae una ola fogosa.

Beto Desuque: - Como al radicalismo. Je.

Mesero: - ¿Qué pasa con el radicalismo?

Beto Desuque: - Ah, estás desactualizado. ¿Cómo qué pasa con el radicalismo? ¡Se tiran con de todo en pleno verano! Ahí sí que está alta la temperatura. Pensar que les hicieron fama de pecho-fríos.

Mesero: - Jajaja. No seas malo.

Beto Desuque: - Nah, ¡¿qué voy a ser malo?! Pero lanzaron el año electoral muy temprano. Están más ambiciosos que los peronchos, mirá lo que te digo.

Mesero: - Y eso es mucho decir.

Beto Desuque: - Ponele. En realidad no sé si están más ambiciosos. Me parece que están más desordenados. Pasa casi siempre cuando no hay un jefe que ordene, ¿no?

Mesero: - Si vos decís… ¿Pero cómo viene la mano?

Beto Desuque: - Viene picante. Je. Hay un mar de fondo que se viene moviendo desde hace tiempo. Básicamente, no alcanzan los cargos que se ponen en juego para la cantidad de personas que quieren su lugar.

Mesero: - Je. Y sí. Eso pasa siempre y en todos lados.

Beto Desuque: - Ponele. Pero el tema es que a los radichetas les encanta la pelea interna. Me parece que les gusta mucho más eso que la elección general.

Mesero: - No sos el primero que lo dice…

Beto Desuque: - El asunto es que además de los cargos electorales, en cualquier momento va a haber elecciones para renovar las autoridades partidarias. Por eso lo empezaron a cascotear a Tito Pechín, que es el presidente del comité provincial.

Mesero: - ¿Pero cómo se dan los alineamientos?

Beto Desuque: - ¡Andá a saber! Jajaja. Ya no es tanto como antes, que estaba clarito: los celestes, los blancos, los azules… Ahora está todo un poco mezclado y transversal.

Mesero: - Ah.

Beto Desuque: - Pero algunas alianzas se tejen: Pechín quiere ser candidato legislativo, pero capaz que se baja para dejarle el lugar a algún celeste, como El Poli Altolaguirre, ponele.

Mesero: - Ah, mirá…

Beto Desuque: - Eso suponiendo que se ponen de acuerdo… Hay que ver si a Leandro Altolaguirre no le pica el bichito de la candidatura personal… Je.

Mesero: - ¿Y del otro lado quién estaría?

Beto Desuque: - De los otros lados, querrás decir… Jajaja. Porque por un lado está Marino, que no se va a querer bajar del caballo por nada. Ya lleva 18 años de senador…

Mesero: - Son muchos.

Beto Desuque: - Ponele. Es la misma cantidad que estuvo River sin salir campeón. Aunque no tenga nada que ver, porque Marino vendría a ser todo lo contrario, ¿no?: un ganador.

Mesero: - Si sigue…

Beto Desuque: - Pero más vale que está también anotado el sector de Torroba… Y está Kroneberger jugando su propio juego, en fin… Nombres no van a faltar.

Mesero: - Fua.

Beto Desuque: - Y pará que hay más, porque las mujeres del partido también están armando su propia lista, parece. Y la juventud patalea por su lado porque son siempre los mismos y no hay renovación…

Mesero: - Tienen para hacer dulce…

Beto Desuque: - Ponele. Les diría don Crisólogo Larralde: "Calma, radicales". Pero es una especie de "Antón Pirulero", ¿te acordás? "Cada cual / cada cual / atiende su juego / y el que no / una prenda tendrá…".

Mesero: - Ja. Y es un juego que los boinas blancas conocen bien.

Beto Desuque: - Mucho. Y les gusta. A su juego los llamaron. Falta que termine siendo candidato Tito Reinoso…

Mesero: - ¿Quién es Tito Reinoso?

Beto Desuque: - Ah, tenés poca memoria… Tito Reinoso tuvo su cuartito de hora como dirigente radical. Buen orador. Fue diputado provincial. En aquel tiempo creo que de la Línea Morada, que lideraba Juan Carlos Passo.

Mesero: - Uy, qué viejo todo, Beto… ¿Por qué me saliste con eso?

Beto Desuque: - Ah, porque volvió a ser noticia… Pero del otro lado del mostrador. Tito casi siempre denunciaba hechos de corrupción de los gobiernos peronistas…

Mesero: - ¿Y ahora?

Beto Desuque: - Ahora le pidieron un año de prisión en suspenso porque como empleado judicial parece que espiaba expedientes…

Mesero: - Uy.

Beto Desuque: - Así que no, no va a ser candidato. Je.

Mesero: - Y pensaba… ¿Encima a todo ese lío los radicales después lo tienen que meter en la misma bolsa que el PRO?

Beto Desuque: - Ponele. Y ahí también se cuecen habas, desde ya…

Mesero: - ¿Cómo? ¿Qué decís?

Beto Desuque: - Que hay flor de interna. Están los macristas, los larretistas y qué sé yo… Los que le siguen dorando la píldora al Colo Mac Allister por un lado, los que bancan al pibe Maquieyra por otro, Darío Casado que con un grupo está haciendo la suya, más otros que miran de reojo como el Maxi Aliaga, Adriana Leher…

Mesero: - Un menjunje.

Beto Desuque: - Ponele. Metés eso en la coctelera y no sabés qué sale. O sí: sabés qué sale. Un trago bastante amargo. El asunto es quién se lo traga. Je.